Así que 10 de enero de 1990, ¿eh?. Capricornio. Personalmente no creo en esas cosas, pero puede que nos sirva más adelante. Si no, siempre es un tema interesante para abrir conversación con ella, si surge la ocasión.

En fin, continuemos con esto, que estoy deseando acabar con esta historia de Vindimex y poder volver a mis proyectos. En la Divergencia cada uno tiene el suyo, ¿sabes? O incluso varios. Nos ayudamos y retroalimentamos los unos a los otros con las cosas que queremos sacar adelante. Despegue es una de esas cosas, por eso llegamos hasta ti tan rápido.

Oye, ¿y tú qué vas a hacer cuando acabe esta dictadura y puedas dedicarte a desarrollar lo que te dé la gana?

…

¿¡Cómo que no lo tienes claro?!

Bueno, venga, que no panda el cúnico, tengo algo para ti que puede ser de ayuda. «La pirámide de ideas». Ya, ya sé que no tiene un nombre muy épico, pero eh, funciona guay.

Coge un folio en blanco y copia este esquema:

Cierra los ojos y piensa en lo que más te gusta hacer, tu afición preferida, aquello a lo que dedicarías toda tu vida. Escríbelo en la casilla 1.

A continuación, piensa otras cosas a las que te gustaría dedicar mucho tiempo, cosas que disfrutas. Rellena el resto de las casillas con esas actividades (2 al 6).

Mirando la pirámide, escribe en otro folio en blanco un proyecto que podrías desarrollar con la idea 1, 2, y así hasta la 6.

Y ahora viene la fiesta: pensar ideas de proyecto uniendo distintas casillas:

– Proyecto nuevo uniendo las casillas 1 y 5.

– Proyecto nuevo uniendo las casillas 2 y 3.

– Proyecto nuevo uniendo las casillas 4 y 6.

– Proyecto nuevo uniendo las casillas 1, 2 y 3.

– Proyecto nuevo uniendo las casillas 5, 4 y 6.

A continuación piensa en un proyecto uniendo las casillas que desees. Así, a lo loco.

Eh, todas las ideas son válidas aquí, así que nada de boicotearte, ¿entendido, Divergente? Para hacernos la vida imposible ya tenemos a Vindimex.